Los buenos cierres de temporada no necesariamente significan siempre una continuidad positiva para lo que viene por delante.había llevado al Olympique de Marsella a terminar en el segundo lugar de la Ligue 1 la temporada pasada, pero renunció a su cargo por desacuerdos en cuanto a la gestión de los jugadores. Mientras tanto, en La Liga, Julen Lopetegui tuvo un inicio espantoso tras haber finalizado cuarto en la última edición con el Sevilla.
La gota que rebalsó el vaso se dio este sábado con la derrota del cuadro andaluz contra el Atlético de Madrid en su propia casa por 2 a 0, sin mencionar el desalentador arranque en la Champions League que pondría alSi bien los aficionados tienen un buen recuerdo de su paso por el Sánchez-Pizjuán, lo cierto es queY es que Julen Lopetegui no es el único señalado por el rendimiento del club, sino también todo el equipo, algo que quedó en evidencia...
A pesar de no haber pasado de un cruce de palabras a los gritos entre el jugador y el espectador, el club lanzó un comunicado en las redes sociales para minimizar el suceso sin mucho éxito. Los reclamos continúan y no hay sonrisas dentro del plantel en lo que parece ser el fin de la era Lopetegui, por lo que
tendrá que ser el piloto en medio de la tormenta y calmar las aguas si llega a tomar el timón del Sevilla.Sevilla se posicionaba como uno de los candidatos a pelear los primeros lugares esta temporada por el cierre que había tenido en el torneo anterior, pero con nueve partidos disputados entre ambas competencias, apenas lleva una victoria. La Liga arrancó con la derrota ante Osasuna, seguida de un empate con Valladolid y otras dos caídas con Almería y Barcelona.
A esto hay que sumarle el 4 a 0 ante Manchester City con el que debutó en la Champions League, seguido de un encuentro sin goles con Copenhague. De esta manera,tendría mucho trabajo por delante en el cuadro español, que marcha decimoséptimo en la tabla, a un punto de la zona de descenso, y es último en el Grupo G de la competencia europea sin siquiera haber enfrentado todavía al Borussia Dortmund.