El mariscal de campo C.J. Stroud y el No. 4 Ohio State se quedaron cortos, y este tiene que doler.
Después de dominar al No. 1 Georgia durante la mayor parte de los primeros tres cuartos, los Buckeyes terminaron su temporada el domingo temprano con una segunda derrota consecutiva. El primero, ante su archirrival Michigan el 26 de noviembre, fue bastante malo, pero el dolor de perder una semifinal nacional 42-41 en el Peach Bowl después de liderar a los Bulldogs por 14 en el último cuarto debe sentirse peor.
Pero no fue hasta que el intento de gol de campo de 50 yardas de Noah Ruggles, un intento de toda la carrera para el estudiante graduado de quinto año navegó bien a la izquierda que Ohio State tuvo su destino sellado. Stroud hizo lo que quiso gran parte de la noche con poca presión proveniente del frente defensivo de Georgia. Demostró por qué se ubica entre los cinco primeros entre los mariscales de campo de FBS en touchdowns, eficiencia de pases, yardas por intento y yardas por finalización.