desde la base de Vandenberg, en California, con un objetivo claro: chocar intencionadamente con un asteroide para desviar su trayectoria y probar así que es posible frenar un supuestoimpedir que un meteorito llegue a nuestro nuestro planeta y lo destruya. La Agencia Espacial ha publicado la primera imagen captada desde la nave.
Un ataque exitoso respaldaría la idea de que, en el futuro, esfuerzos similares podrían desviar asteroides amenazantes hacia cursos más seguros , lo que los convierte en máxima prioridad para los esfuerzos de defensa planetaria. El problema es que no son más que puntos de luz para los telescopios terrestres, lo que los hace difíciles de detectar, y más aún de estudiar.
", dice Cristina Thomas, científica planetaria de la Universidad del Norte de Arizona que dirige el equipo de observación de la misión DART.niusdiario.esLas pistas de que no todos los asteroides son rocas sólidas y monolíticas se han acumulado en los últimos años. En 2019, la sonda Hayabusa2 de Japón disparó un proyectil de cobre de 2 kilogramos al asteroide Ryugu, creando un cráter sorprendentemente grande, de 14 metros de diámetro.
Recientemente, ella y su colega optimizaron un código de computadora que modela una onda de choque 3D para acelerar el cálculo a unas pocas semanas. Inesperadamente, Distintios científicos llevan meses simulando en laboratorio el impacto sobre una asteroide más débil y en todos lo casos se ha demostrado que sus explosiones. Un equipo de instrumentos observará el 26 de septiembre si la colisión real coincide con las simulaciones.
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