alcanzará a 63.000 trabajadores, algo más del doble de los que actualmente se encuentran en ERTE en todo el país, va dirigido a"empresas que hayan aplicado o estén aplicando a sus trabajadores" expedientes dede empleo y tiene como objetivo desarrollar"especialidades formativas en función de las necesidades de recualificación" de su plantilla.
"No se cubre porque las necesidades de formación deben estar regidas por un sistema más flexible, menos burocrático y vinculado a las empresas, con lo que al final no se va a dar la formación que necesitan las empresas sino la que ofrecen los centros", anota Moreno, que considera"necesario habilitar medios e instrumentos para que las empresas que detectan necesidades de formación, directamente o a través de la negociación colectiva, puedan...
Los agentes sociales mantienen contactos con el Ministerio de Trabajo para modificar la normativa sobre formación laboral, cuya vinculación a los ERTE ha tenido que esperar dos años pese a que fue incluida en el primero de los acuerdos dey el tejido productivo ante la pandemia, en marzo de 2020, y a que ya entonces contó con el apoyo de los principales sindicatos y patronales.