El incidente conmocionó a los espectadores y oyentes que seguían su programa de radio, emitido por Gold FM en la ciudad de Calamba, en Misamis Occidental, en la isla de Mindanao.
Según las investigaciones, Jumalon habría tenido una acalorada discusión horas antes de su muerte, relacionada con un conflicto de posesión de tierras. Esta discusión estaba relacionada con demandas deEl fatal ataque ocurrió mientras Jumalon retransmitía su programa desde su domicilio.
El presidente filipino condenó el ataque y ordenó una investigación para identificar y llevar ante la justicia a los responsables. En un mensaje en su cuenta de Twitter, afirmó: "Los ataques contra periodistas no serán tolerados en nuestra democracia y aquellos que amenacen la libertad de prensa afrontarán las consecuencias"La comunidad internacional y los defensores de la libertad de prensa han expresado su preocupación por la creciente violencia contra los periodistas en Filipinas y la necesidad de garantizar la seguridad de quienes ejercen esta importante labor.