El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) lleva más de tres años y medio caducado y la falta de entendimiento entre los partidos políticos, principalmente PSOE y PP, invita a pensar que esta legislatura no se renueve el órgano, tal y como reconocía el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Los de Alberto Núñez Feijóo mantienen bloqueado el órgano de los jueces sobre el que ansía mantener el control conservador; frente a esto, el PSOE ha modulado su discurso en todo este tiempo. Desde Bruselas, alertan de que la situación es insostenible.

La Comisión Europea reclama la urgente renovación del gobierno de los jueces españoles y, después, que se reformule el método de elección del mismo para evitar futuros bloqueos por falta de acuerdos políticos, en una coyuntura donde la polarización política parece haber venido para quedarse.

El PSOE actúa ahora en estas coordenadas, tal y como ha podido corroborar Público. Los socialistas están abiertos a buscar nuevas fórmulas para modificar el método de elección del CGPJ. En este sentido se orientan las reuniones que mantiene el partido con las asociaciones de jueces sobre las que informaba este diario. Sin embargo, desde Ferraz advierten: no habrá un nuevo mecanismo para renovar el órgano hasta que no se actualice la actual composición mediante las reglas del juego que están en vigor.

En el PSOE recuerdan que la decisión de cómo se elija la composición del órgano de gobierno de los jueces corresponde al Legislativo, es decir, al Congreso y Senado.

Actualmente, la ley indica que los 20 vocales del CGPJ han de renovarse cada cinco años (plazo que expiró hace más de tres y medio). De ellos, 12 han de ser jueces y ocho, juristas de acreditado prestigio. La Cámara Alta elige la mitad y la Baja, la otra, ambas por una mayoría de 3/5 de los representantes. Los jueces y magistrados eligen dos listas previas que presentan al Legislativo y que votan por un lado diputados y senadores por el otro.

Esta ley hace que, en la práctica, haga falta un acuerdo entre Ferraz y Génova para aprobar la renovación. Por ello, desde la judicatura, magistratura y los fiscales, proponen alternativas para intentar desbloquear la cuestión. Las asociaciones profesionales elaboran sus propuestas, así como los partidos políticos también las tienen.

El acuerdo, cada vez más lejos

El mayor punto de conflicto está en ver el papel que se le otorga a las Cortes, sede de la soberanía popular, en el método de elección. Si es la judicatura la que ha de tener más poder de decisión o si, por el contrario, este ha de residir en el poder político. Ahí se encuentran buena parte de las diferencias entre las opciones de renovación del método de elección de los integrantes del gobierno de los jueces.

El acuerdo ha sido imposible hasta el momento. El CGPJ se acerca a los cuatro años desde su fecha de caducidad, lo que también conlleva a una difícil situación en el Tribunal Supremo, donde las vacantes no se renuevan. En la recta final de la legislatura, además, nada hace prever que PSOE y PP vayan a llegar a un acuerdo. Las elecciones se acercan, mal momento para pactos y acuerdos.