Una campaña publicitaria promocionada por Marcha por la Asociación Católica de Propagandistas sembró la semilla de la polémica la semana pasada al exhibir en distintas ciuades del país un cartel en el que se indicaba que "rezar frente a una clínica abortista está genial", y en el que se añadía: "En España se practican cada año más de 99.000 abortos. El delito de los que rezan frente a los abortorios es querer salvar alguna de estas vidas".

En ese mismo cartel avisaban de que "este mensaje podría ser cancelado por la inminente reforma de la Ley del Aborto". Más allá de indagar en la agrupación religiosa encargada de la creación de esta campaña y de la financiación de este controvertido proyecto, cuestiones que ya se trataron días atrás en laSexta Clave, cabe destacar que este cartel ha vuelto a ocupar el centro de muchas, muchas miradas. De una forma distinta.

Esta vez, no ha sido por su peligroso mensaje, sino por la respuesta que ha recibido por parte de numerosos usuarios de redes sociales. Porque no solo se ha criticado y denunciado el mismo, lo que llevó a varias ciudades españolas, como Valencia o Murcia a retirarlos para evitar la polémica -no quisieron hacerlo, de momento, Málaga o Madrid, justificando esta última su decisión en que debe prevalecer la libertad de expresión-.

Los internautas han querido responder a este cartel de la misma forma que la asociación autora del mismo quiso llamar la atención a quienes se fijaron en su proclama: lanzando nuevos carteles con idéntico estilo pero con mensajes muy distintos. Es lo que ha sucedido, por ejemplo, en Vitoria, donde, con el mismo diseño que el primero, se podía leer lo siguiente: "Rezar frente a un pedófilo en una iglesia es lo habitual".

Y se añadía: "Un mínimo de 216.000 víctimas entre 1950 y 2020 de agresiones sexuales a menores perpetradas por entre 2.900 y 3.200 sacerdotes y otros responsables eclesiásticos. Todos lo sabían y nadie hizo nada". No es el único cartel de estas características que se ha visto en la ciudad. Otro idéntico afirma en su cabecera que "rezar junto a una institución que robó miles de bebés es común".

En ese mismo cartel, se aseveraba que "las asociaciones calculan que 300.000 bebés fueron robados entre 1940 y 1990 en España". Una vez más, se añadía la misma coletilla que en el mensaje original: "Todos lo sabían y nadie hizo nada". Estos carteles no han tardado en difundirse como la pólvora por redes sociales, y de momento el Ayuntamiento de Vitoria no se ha expresado sobre los mismos. Tampoco ha reaccionado sobre este asunto Marcha por la Asociación Católica de Propagandistas.