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Puede que si echas la mirada atrás recuerdes con nostalgia aquellas mechas que llevaste sobre 2012. Entonces las californianas eran lo más y pocas se resistían a un coloración que te proponía ir a la última y un mantenimiento mínimo. Lucir la raíz era un motivo de orgullo y el paso por la peluquería se podía espaciar incluso seis meses. Luego llegaron las balayage, la misma técnica pero más integrada con el color natural, y después las baby lights, que tratan de imitar esos cabellos rubísimos que tienen algunos niños en melenas castañas, y más tarde la técnica del contorno. Nada hacía indicar que las mechas, tal y como las conocemos pudieran desaparecer.

Pero recientemente se han dado algunos giros de guion, y es que la pandemia ha generado muchos cambios en la concepción de belleza y el cierre de las peluquerías en el confinamiento más duro nos hizo tener que aceptar otra vez las melenas con raíces como una tendencia, aunque esta vez autoimpuesta. Además de esto, la naturalidad y la comodidad fueron ganando terreno en todos sus ámbitos y cuidado del cabello no fue una excepción. Los tonos naturales han ido subiendo peldaños respecto a las coloraciones más artísticas, como los tonos pastel -sobre todo el rosa- o los rubios muy extremos, trabajos muy solicitados en los salones antes de la pandemia.

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Esta corriente la confirman algunas celebridades, que si bien antes eran fans incondicionales del rubio, ahora han decidido darle una oportunidad a otros tonos. La última en sumarse al cambio era Ester Expósito, que desde México sorprendía con un tono de cabello bastante más oscuro de lo que acostumbra. Se trata de un rubio oscuro, casi castaño que ha lucido en su cuenta de Instagram en su versión más natural. "Con una michelada celebro al personaje que voy a dar vida en un proyecto maravilloso, en este país que adoro", estas palabras acompañaban a la foto con la que la actriz compartía su nuevo look, por lo que es probable que su cambio se deba a exigencias de guion de su nuevo proyecto.


También otras grandes personalidades y creadoras de tendencias como Hailey Bieber, Taylor Swift, Karlie Kloss o Gigi Hadid han dado el salto hacia un cabello más natural. Y es que los expertos confirman que tras un periodo en el que ha sido imposible acudir a los salones a retocar nuestra coloración -algo que en época prepandemia, si no hacíamos puntualmente nos podía provocar malestar-, se ha percibido una mayor aceptación de los colores naturales y más neutros, los que van desde los tonos chocolate, hasta los castaños con matices cobrizos, como el de la hermana de Bella Hadid, hasta los rubios oscuros como el de la actriz madrileña o el de la mujer de Justin Bieber.

Sin embargo, los expertos se muestran cautos ante esta tendencia incipiente ya que es poco probable que signifique el fin de las mechas. Esta técnica ha permanecido en los salones de belleza durante décadas y permite aclarar los cabellos con un resultado natural obteniendo facciones más dulces y rostro más rejuvenecidos, porque lo que aunque haya quien se cambie de equipo, los peluqueros creen que el bando de las mechas estará todavía muy bien nutrido durante mucho tiempo.