Se escucha con demasiada frecuencia por estos lares hablar de la Monarquía como una institución anacrónica. Y, sin embargo, juicios tan ligeros no alcanzan a comprender lo bien que funciona en pleno siglo XXI en naciones tan modernas como Dinamarca.
Hazte Premium desde 1€ el primer mes
Aprovecha esta oferta por tiempo limitado y accede a todo el contenido web
Si lo prefieres