"Estamos devastados por anunciar el fallecimiento de nuestro amado Virgil Abloh, devoto padre, esposo, hijo, hermano y amigo". Así arranca el comunicado publicado en redes sociales donde se ha dado a conocer la muerte del director artístico de la línea masculina de Louis Vuitton, a los 41 años de edad. Abloh estaba casado con Shannon Sundberg y deja dos hijos, Lowe y Gray.
Durante más de dos años, Virgil Abloh luchó contra una forma rara y agresiva de cáncer, el angiosarcoma cardíaco, continúa el comunicado. "Eligió soportar su batalla en privado desde su diagnóstico en 2019, sometiéndose a numerosos tratamientos experimentales, mientras seguía absolutamente implicado en proyectos de moda, arte y cultura. A pesar de todo, su ética de trabajo, su curiosidad infinita y su optimismo nunca flaquearon".
Virgil Abloh representa un momento clave en el devenir de la moda, hecho que sin duda percibieron muy bien los editores de la revista Time cuando lo consideraron una de las 100 personas más influyentes de 2018. Su acceso al mundo del diseño coincide con la apertura del mundo del lujo a otros sectores de la población -como mínimo, desde un punto de vista estético- y su adaptación a imperativos del 'zeitgeist' como el abrazo a la diversidad, la individualidad, o la juventud.
Estuvo en el momento oportuno en el lugar indicado, en concreto en una residencia en Fendi en 2009 con el rapero Kanye West y allí nació una fructífera colaboración que desembocaría en la creación de su propia marca, Off-White. El éxito fue inmediato y convirtió a su creador en uno de los más deseados del planeta moda. Ni es casual ni improvisado que en el contexto de la mencionada reubicación conceptual del mundo del lujo Abloh se convirtiera, en 2018, en el director creativo de la línea masculina de Louis Vuitton. De paso, el diseñador añadía a su mito el de símbolo para la comunidad negra, al ser el primero de ascendencia africana en ocupar el cargo.
Lo que Abloh hizo en Louis Vuitton escandalizó a los más conservadores y entusiasmó a quienes consideran que la moda, y con ella las grandes marcas, no son cuadros estáticos, sino historias tejidas con los distintos hilos que elige el tiempo según convenga. Ya en su primera campaña para la firma francesa, la de primavera-verano 2019, sorprendió con su propósito de investigar la evolución individual a través de las lentes de la inclusión. Qué tenía esto que ver con Vuitton fue algo que se preguntaron muchos. Pero Abloh tenía ya la respuesta: el viaje. El viaje como eje central, ese viaje que es ADN irrenunciable de la marca francesa.
Abloh revitalizó el diseño de moda masculina de Vuitton, pero sobre todo revitalizó el concepto y la misión de la marca. Él mismo, como leemos en el comunicado de su muerte, a menudo decía: "Todo lo que hago es para la versión de mí mismo a los 17 años". Esa juventud impregna todo su trabajo, desde el concepto a la realización.
El pasado año, cuando los grandes de la moda aún intentaban recomponerse tras lo peor del coronavirus, Vuitton, de la mano de Abloh, sorprendía con una campaña que empezaba con una creación audiovisual en forma de dibujos animados y después se materializaba en forma de desfile. Los mensajes (manifiesto del creador incluido) no podían ser más contemporáneos: reciclaje, sostenibilidad, medio ambiente, respeto por las minorías. "Me comprometo con la inclusión, la unidad, diversidad y individualidad", decía Abloh en el manifiesto.
El que acaba de morir de manera tan prematura había estudiado Arquitectura antes de orientarse a la moda y era el hombre renacentista que le correspondía a nuestro tiempo. Al margen de la moda (además de su propia marca y la dirección creativa en Vuitton hizo colaboraciones puntuales con otras enseñas como Ikea o Nike), su energía y su sensibilidad artística siempre lo empujaron más allá, por ejemplo a trabajar con el artista japonés Takashi Murakami. Sin olvidar su amor por la música. Dj desde la adolescencia -todavía hay quien lo recuerda pinchando en Ibiza-, en 2018 publicó su primer disco, 'Orvnge', de la mano del mítico productor de electrónica Boys Noize. Decididamente, ese, 2018, fue su gran año. Un futuro lleno de moda, arte, música, se abría entonces ante él. Desgraciadamente, se ha cerrado demasiado pronto.
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