El centro de Londres vivió este sábado una multitudinaria manifestación negacionista en la que estaba Kate Shemirani, una mujer que compara al Servicio Nacional de Salud Británico con los nazis.

Se trata de una enfermera de 54 años que se encuentra suspendida de empleo y sueldo por afirmar, entre otras cosas, que "somos parte de un experimento humano de las farmacéuticas". Sus ideas están calando en el país: uno de cada cinco ingleses cree que el coronavirus es una conspiración.

Su propio hijo asegura estar asustado por el odio y la violencia de su madre. Pero Shemirani no es la única activista que alimenta las teorías conspiratorias con información falsa. Joseph Mercola es un conocido médico y youtuber que se ha convertido el principal difusor de fake news sobre la vacunación en EEUU.

A través de sus redes sociales, acusa a las vacunas de ser un fraude médico, mientras él se enriquece vendiendo medicinas naturales. Y todo ello en un país donde se han multiplicado los casos en las últimas semanas y que no alcanza la inmunidad de grupo por el gran porcentaje de escépticos.