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Papa apoya derechos gay, pero no quiere casarlos
En Colombia la unión entre personas del mismo sexo es legal desde
2016. El tema es distinto si se mira desde el matrimonio católico.
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Según la corporación Colombia Diversa “casi 30 países han aprobado el matrimonio entre parejas del mismo sexo”. FOTO Edwin Bustamante
17 de septiembre de 2021
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El matrimonio entre personas del mismo sexo ha estado relacionado con polémicas, aunque en los últimos años se ha visto un avance en cuanto a las leyes que ratifican la unión desde lo legal, explica Adriana Henao, magíster en Derecho de Familia de la Universidad Autónoma de Barcelona y docente en la Universidad de Medellín. Sin embargo, la religión católica, en cabeza del papa Francisco, ratificó el día de ayer su posición negativa al considerar un matrimonio por la Iglesia.
En una rueda de prensa, el papa respondió la pregunta de un periodista: “El matrimonio es un sacramento de la Iglesia y no se puede cambiar, pero hay leyes que intentan ayudar a la situación de tanta gente de orientación sexual diferente, y esto es importante. Que se les ayude, pero sin imponer cosas a la Iglesia que por su naturaleza no se pueden”.
Implicaciones positivas
Henao considera que esa postura del papa “es una declaración de apertura, como él ha venido haciendo desde la Iglesia católica”, y es bien recibido el reconocimiento que hizo el pontífice al esfuerzo de los estados por aceptar el matrimonio como un contrato, una regulación civil que respeta e iguala a sus individuos.
De forma similar opina Michael Restrepo Santamaría, miembro del Colectivo Irídice y del Consejo Consultivo Lgbtiq+ de Envigado: “Jorge Mario Bergoglio, más allá de ser la cabeza del cristianismo católico, ha mostrado humanidad y respeto hacia personas y grupos no cristianos”, y resalta que en su declaración hay dos conceptos que pueden confundirse: la unión civil homoparental y el matrimonio como vínculo religioso.
El primero, explica Restrepo, se refiere a la potestad legal de unión, una figura que desde el derecho ya se ha logrado conseguir en algunos países (ver antecedentes).
Para el segundo, en cambio, entran en juego los ritos de orden religioso que se basan en una tradición y fundamentos que no necesariamente afectan o vulneran a las personas Lgbtiq+, solo son de índice ceremonial.
Matrimonio religioso
Henao rescata que algunos grupos cristianos, no católicos, han dirigido ceremonias matrimoniales que culminan con la firma del casamiento legal. Destaca que esta práctica no contradice ni asegura la aprobación del matrimonio igualitario por parte de la Iglesia debido a los sacramentos.
Como ella explica, estos son, por así decirlo, las guías para una vida cristiana plena y en el caso del matrimonio compuesto por la unión entre hombre y mujer viene desde el génesis y por tanto es muy difícil que cambie. Resalta que es una cuestión de fundamento, de los pilares de la Iglesia.
Matrimonio en Colombia
Elizabeth Castillo, abogada y activista, señala que “en Colombia hay dos maneras de oficializar una familia, una es la unión marital de hecho (decisión libre y consentida de dos personas de formar un hogar o hacer vida común), a la cual tenemos derecho los homosexuales desde 2007, y la otra es la del matrimonio, que empezamos a tener derecho en 2011 y definitivamente a partir de 2016”.
Además agrega que “en Colombia ya nos podemos casar, ya podemos adoptar, de manera que el marco normativo no se afecta por la declaración de ningún líder religioso”.
Aun así, desde la organización Colombia Diversa, fundada en 2004, señalan que “lamentablemente, en algunas notarías y juzgados del país, desatendiendo los mandatos de la Corte Constitucional y el ordenamiento jurídico colombiano, se niega el matrimonio civil a parejas del mismo sexo. Esto no solo no aporta a una vida armoniosa en comunidad, sino que es discriminatorio”.
¿Cambia algo?
Castillo reconoce que “las declaraciones del papa solo tienen incidencia sobre las personas que profesan la religión católica, nada más”, en cuanto a lo político no tienen ningún tipo de impacto.
Así mismo, Restrepo considera que tal vez sirva para que los seguidores de la fe católica que rechazan a las personas Lgbtiq+, inspirados por el papa, practiquen el respeto y la tolerancia que profesa su religión.
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