Reciclar ropa le ayuda al ambiente

Con la creciente preocupación por la sostenibilidad y el medio ambiente, darle un nuevo uso a la ropa es una buena idea.

FOTOS Cortesía Diana Zuleta, Grupo Éxito/María Luisa Ortiz y Camilo Suárez.
María Luisa Ortiz con las telas ya desarmadas del uniforme de la policía. FOTO Cortesía Robert Romero de la Corporación Mundial de la Mujer.

El vestido con el que se casó la princesa Diana de Gales con el príncipe Carlos en 1981 tenía un encaje antiguo que perteneció a la reina consorte María de Teck, la esposa del rey emperador Jorge V del Reino Unido. Las monarquías también han dado un nuevo uso a telas o hasta a prendas completas.

La consultora de moda chilena Eva Medalla, quien asesora varias marcas en América Latina, explica que el tema del reciclaje de ropa viene de antiguas culturas (como la Inca), “ante la escasez de recursos era práctico y se heredaba como legado. Familias de renombre que reciclaban, sobre todo vestidos de mujeres, los pasaban de generación en generación transformándolos, en ocasiones, sin perder el sello tradicional de la familia”.

Evolución y cambio

Si en épocas pasadas reutilizar (ver glosario) prendas era común, ¿qué pasó entonces? Medalla describe que la ropa dejó de tener un significado sociocultural y se trasladó al puro consumo. “Cuando la moda rápida –conocida como fast fashion–, irrumpe a finales de los 70, en general se empieza a democratizar llegando a más públicos. Acelera el proceso de creación y de tendencias con prendas que están hechas para durar poco”.

Con ropa que por su desgaste va a parar a la basura, no hay como reciclar. La misma Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo argumenta que el medio ambiente sufre más al “comprar, usar y desechar”.

Loula Mercedes, diseñadora de moda y textil con maestría en Moda y Sostenibilidad del London College of Fashion, detalla que “al discutir las bases de la moda sostenible, aparecen criterios como el bajo impacto ambiental de los materiales que están sujetos a unirse a la cadena de reciclaje”.

Medalla aclara que el tema de los recursos naturales, que se precisan para generar textiles, es algo que siempre ha preocupado y hoy más que nunca hay mas consciencia.

“Y necesitamos el concepto de reciclaje para que incluso la gente se preocupe de usar fibras de buena calidad. Considero que el patrón de consumo es el que tiene que cambiar y por eso es tan importante darle valor y significado a las prendas de vestir. Si empezamos a preferir una prenda reciclada a una 100 % nueva, se generará un cambio en la industria”.

Estos son ejemplos de que la ropa puede tener otra vida y otros usos .

DE NOVIA A NOVIA

Hasta las monarquías reciclan su armario

La iniciativa de Mariana Ramírez de La libreta morada y la diseñadora Alejandra Aranzazu es un evento itinerante que le da una nueva vida a ese vestido que una mujer usa solo una vez y no repite: el del matrimonio. Se compran y venden vestidos de novia usados en un 70 % y nuevos 30 %. La próxima edición será en Bogotá del 6 al 14 de marzo.

TODOS PONEN

María Luisa Ortiz elaboró con uniformes de la Policía Nacional, que no se pueden botar ni regalar, una colección de bolsos y accesorios (ver entrevista) que se venden en 16 almacenes Éxito en el país. En la confección de las prendas participaron víctimas, desplazados, desmovilizados y reinsertados.

ROPA USADA

2egunda vida es un proyecto de moda sostenible que sirve de intermediario para que quien quiera vender su ropa usada y en buen estado pueda hacerlo. Liderado por Cata Aristizábal tiene prendas desde 15.000 pesos hasta vestidos de diseñador.

Mover la moda para mantener la paz
María Luisa Ortiz - Diseñadora

¿Como nace esta idea?
”En 2016, en el proyecto Maestros Costureros, hice un acompañamiento a personas sobrevivientes del conflicto. Quedamos muy enganchados. La máquina de coser que había en casa, el botón o el ruedo que cosimos es el hilo conductor que nos unió. Este oficio nos puso en el mismo plano y desapareció todo lo demás”.

¿Y lo de los uniformes de la policía?
“A ellos les dan tres dotaciones al año y ¿qué hacen con los uniformes viejos? Los queman o pican. No son prendas que puedan regalar para que usen otras personas, son de uso restringido. Al pensar qué hacer con ellos tocamos varias puertas. La Unión Europea me presenta a la Corporación Mundial de la Mujer, yo llamé al Grupo Éxito y todo se fue dando para que esta cadena de economía circular se diera, por eso el proyecto se llama Todos ponen, como la pirinola, ese juguete con el que jugábamos de niños”.

¿Cómo se organizó el trabajo?
“Recogimos 1.800 uniformes en un camión, los llevamos a la lavandería. Se desnaturalizó cada prenda (quitarles las insignias), se descosieron, se plancharon. Diferentes piezas sirven para diferentes accesorios. Cuando ya todo estaba separado, se repartió en los talleres”.

Hubo otro impacto además del ambiental...
“En la confección de las prendas trabajaron desplazados, víctimas, desmovilizados, reinsertados y personas en proceso de reincorporación, algo increíble”.

¿Qué la inspiró?

“El punto de quiebre en mi vida profesional como diseñadora lo da el proyecto de Identidad Colombia en 2003, ahí mi vida cambió, hice una conexión con el sector artesanal y con el propósito de que mi moda y mi creatividad tengan un sentido social y a través de mi trabajo pueda cambiar algo en la gente. Un propósito más allá de que sea lindo, estético, que se pueda usar o sea de buena calidad, bien hecho, que es todo lo que trae mi oficio, pero que además tenga un sentido que cambie la vida a la gente por ahí es y ese pensamiento no me abandona”.

¿Cuál es el siguiente paso con este proyecto?

“Esperar que haya otra temporada escolar. Durante el Bogotá Fashion Week voy a hacer una propuesta de accesorios con este material porque quiero salir a contar este cuento”.

¿La moda puede ayudar en un momento de confrontación?
“Es un vehículo de comunicación, una herramienta para transformar”.

¿Qué piensa de la moda sostenible?
“Hay que trabajar en ella, no hay salida, no se puede tapar el sol con las manos”.

¿Qué pasa cuando una prenda deja de ser prenda, en este caso las de la policía ya no lo fueron más?

“Hay muchas maneras de reutilizar lo que uno tiene en la casa en vez de botarlo. Primero pensar en quien lo puede usar, alguien que lo necesite. Una prenda puede tener una nueva vida. También la puede reformar, hacerle algún cambio y darle otra oportunidad”.