Para ahorrar energía, el Gobierno dispuso que los empleados públicos trabajen en sus casas pero la Ciudad no adhirió a la medida

El Gobierno dispuso que este jueves y viernes los empleados de la administración pública deberán realizar la prestación de servicios mediante la modalidad de trabajo a distancia, en un intento por reducir el consumo de energía eléctrica que ante la ola de calor de los últimos días alcanzó un récord histórico, lo que derivó en cortes masivos del suministro en distintas zonas del área metropolitana.

El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, salió rápidamente a diferenciarse de la medida de Nación y dejó en claro que no adherirá para los empleados que dependen de la Ciudad. Remarcó que la mayoría del personal está trabajando en los centros de testeos, vacunatorios y otras funciones relacionadas con la pandemia de Covid-19.

"Tenemos toda la gente abocada a eso y es prioridad, no podemos decir que no vayan (a sus lugares de trabajo), estamos metidos en eso", remarcó en conferencia de prensa.

Ante el temor a nuevos cortes de luz, el Gobierno también les está pidiendo a las empresas que reduzcan el consumo de energía entre las 13 y las 16, lo que podría afectar la producción.

El Decreto 16/2022, publicado este jueves en el Boletín Oficial, con las firmas del presidente Alberto Fernández y el jefe de Gabinete, Juan Manzur, establece que la disposición de teletrabajo regirá para los días 13 y 14 de enero de 2022, a partir de las 12 horas.

Se trata de una medida similar a la tomada por Raúl Alfonsín en enero de 1989, hace 33 años, cuando les dieron asueto a los empleados públicos para ahorrar luz.

Precisamente, la normativa que se conoció este jueves fija que los agentes de todas las jurisdicciones, organismos y entidades del Sector Público Nacional "deberán realizar la prestación de servicios mediante la modalidad de prestación de trabajo a distancia, en caso de que ello resulte posible, y se abstendrán de permanecer o concurrir a sus lugares habituales de trabajo".

Asimismo se instruye a los distintos organismos para que "implementen las medidas pertinentes a fin de mantener las guardias necesarias para preservar la continuidad de los servicios esenciales".

En este sentido, en el decreto se indicó que el responsable de cada jurisdicción, organismo o entidad de la administración pública "determinará los equipos de trabajadores y trabajadoras esenciales que deberán prestar funciones en forma presencial, en tanto se trate de áreas críticas de prestación de servicios indispensables para la comunidad".

De esta medida quedan excluidos el personal de la Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de Salud “Dr. Carlos G. Malbrán” (ANLIS), las Fuerzas de Seguridad Federales, Fuerzas Armadas, Servicio Penitenciario Federal, salud y sistema sanitario.

Tampoco alcanza a Guarda Parques Nacionales y Sistema Federal de Manejo del Fuego, Dirección Nacional de Migraciones, Instituciones bancarias y entidades financieras.

En los considerandos del decreto se argumentó que la temporada estival ha reportado altas temperaturas, por directa incidencia del fenómeno de La Niña, en los principales centros urbanos del país tales como la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el Conurbano, Córdoba y Santa Fe. Justamente esta semana el termómetro reportó temperaturas por encima de los 40 grados.

Asimismo, en el decreto se apuntó que fuentes del Servicio Meteorológico Nacional han pronosticado la llegada de un frente de baja presión que, instalado en esta parte del continente, coadyuvará a que las altas temperaturas se vean incrementadas. En si el pronóstico prevé para este jueves, viernes y sábado temperatura máximas que oscilarán entre los 37 y 40 grados.

Las altas temperaturas derivaron, como es habitual, en una mayor demanda de energía. Incluso este martes se registró un nuevo récord histórico de consumo de energía eléctrica. El nuevo pico se estableció a las 13.10, con 27.178 MW, superando al número reportado el 29 de diciembre pasado: 27.019 MW.

La alta demanda de luz y el intenso calor provocó que unos 700 mil usuarios se quedarán sin luz en el área metropolitana.

En los argumentos del decreto, el Ejecutivo Nacional transmitió que "se ve en la obligación de contribuir a mitigar las condiciones en que, temporalmente, se puedan ver afectados los y las habitantes del país, adoptando medidas urgentes, de rápida implementación y breve duración, para lo cual se ha decidido reducir la presencialidad en las actividades de la Administración Pública Nacional a fin de evitar el consumo de energía eléctrica en todos los inmuebles afectados a su normal funcionamiento".

Finalmente se destacó que la decisión de enviar a los empleados públicos a trabajar a distancia se adopta "en el convencimiento que ello se sumará al esfuerzo de diversos sectores del país, que reducirán voluntariamente el consumo de energía eléctrica para así coadyudar a que la población pueda mantener los servicios de agua y energía eléctrica".

GRB