Los socialdemócratas del SPD en Alemania, liderados por Olaf Scholz, se encaminaron hacia la victoria en las elecciones legislativas con un 25,7% de los votos, derrotando al partido conservador que tiene como principal referente a Ángela Merkel.
La Unión Cristiano-Demócrata (CDU), de Merkel, y su aliado bávaro, la CSU, encabezada por Armin Laschet, obtuvo el 24,1% de total de los sufragios, el peor resultado que supieron registrar en su historia de siete décadas.
Con respecto a los frente electorales restantes, Los Verdes terminaron de terceros (14,8%), seguidos del FDP (11,5%) y Alternativa para Alemania (10,3%). Dichos resultados se basan en los número divulgados por la Oficina Federal de la Mesa Electoral.
Tanto Scholz (63) como Laschet (60) dijeron que pretenden tener un gobierno instalado antes de navidad. Para un país acostumbrado a la estabilidad política tras 16 años bajo el liderazgo firme de Merkel, los próximos meses se perfilan tormentosos.
Los alemanes "quieren que haya un cambio en el gobierno y también quieren que el próximo canciller se llame Olaf Scholz", apuntó el candidato socialdemócrata tras conocerse los número preliminares de la elección legislativa.
Mientras tanto, y para los conservadores pese a su resultado "decepcionante", también prevén formar el próximo gobierno. "Haremos cuanto podamos para construir un gobierno dirigido por la unión CDU-CSU", advirtió Laschet.
Los comicios arrojaban resultados muy repartidos, por lo que ambas formaciones mayoritarias necesitarán el apoyo de otros dos partidos para lograr una coalición con peso suficiente para gobernar. Esto no había sucedido desde los años 1950.
Además, este proceso de definición del nuevo gobierno podría sumir a Alemania en un largo periodo de parálisis política. Tras las últimas elecciones, en 2017, se necesitaron más de seis meses para alcanzar un acuerdo y formar la actual gran coalición.
Los resultados antes detallados van perfilando en Alemania un renacimiento inesperado del partido socialdemócrata, dado por moribundo hasta no hace mucho. Un descenso así de los conservadores ensombrecería, además, el fin del mandato de Merkel.
Alemania: ¿qué viene después de Angela Merkel?
Si la tendencia se confirma, Scholz podría estar en posición de suceder a Merkel y desencadenar el "cambio" que prometió al final de su campaña. Con todo, deberá componer una coalición tripartita, algo que 55% de los alemanes prefiere.
Los Verdes, liderados por Annalena Baerbock, que durante un tiempo aparecían como favoritos, tienen suficiente apoyo para incidir en la definición del próximo gobierno. Igualmente, los liberales del FDP recabaron suficiente apoyo para tener la llave del gobierno.
Finalmente, los ultraderechistas del AFD, cuya entrada en el Bundestag en las elecciones de 2017 fue muy comentada, confirmarían su permanencia en el tablero político de Alemania y se transformarían también en un acto decisivo.
JFG
